En nuevas ventajas fiscales para las empresas en 2024 prometen revitalizar el tejido empresarial en Portugal. Estos beneficios fiscales abarcan varias áreas cruciales, como la financiación, la innovación, la internacionalización y la supervisión financiera. De este modo, las empresas portuguesas podrán contar con un amplio conjunto de medidas destinadas a aumentar su competitividad y atraer más inversiones.

Incentivos fiscales para los inversores

En primer lugar, las nuevas ventajas fiscales para las empresas incluyen condiciones fiscales favorables para los inversores. Quienes inviertan en instrumentos de deuda y acciones de empresas portuguesas se beneficiarán de un entorno fiscal más atractivo. En concreto, esta medida pretende diversificar las fuentes de financiación de las empresas, permitiéndoles un acceso más eficiente a los recursos financieros.

Apoyo a las nuevas empresas y a la innovación

Además, las nuevas ventajas fiscales para las empresas también se centran en apoyar a las empresas de nueva creación e innovadoras. En concreto, las nuevas empresas y las que inviertan en investigación y desarrollo (I+D) recibirán incentivos fiscales concretos. Así, estas medidas estimulan la creación de nuevas ideas y la implantación de tecnologías avanzadas, reforzando la capacidad de innovación del país.

Facilitar la financiación

Para facilitar aún más el acceso a la financiación, las nuevas prestaciones incluyen diversas iniciativas. Entre ellas figuran procedimientos simplificados para que las PYME accedan al mercado de capitales. También habrá incentivos para que más empresas portuguesas coticen en bolsa, lo que aumentará su transparencia y visibilidad en el mercado mundial. Además, los estímulos al capital riesgo y a los inversores informales (business angels) pretenden fomentar la inversión en empresas de nueva creación y en empresas en las primeras fases de crecimiento. También se fomentarán las plataformas de crowdfunding y otras formas innovadoras de financiación, que permitirán un acceso más flexible y menos costoso a los recursos financieros.

Internacionalización de las empresas

En resumen, las nuevas ventajas fiscales para las empresas no se limitan al mercado nacional. Con el fin de fomentar la internacionalización, habrá incentivos fiscales específicos para las empresas que amplíen sus operaciones a mercados extranjeros. En concreto, esta medida pretende aumentar la presencia de las empresas portuguesas en el mercado global, contribuyendo a un crecimiento económico sostenible.

Refuerzo de la supervisión financiera

Por último, el refuerzo de la supervisión financiera es un pilar importante de los nuevos beneficios fiscales para las empresas. Así, se reforzará la independencia de los reguladores financieros, garantizando una supervisión eficaz e independiente. Estas acciones promueven la transparencia y la responsabilidad en el sector financiero, evitando prácticas fraudulentas y abusivas.

En conclusión, estos beneficios ofrecen un sólido conjunto de medidas destinadas a reforzar la competitividad y la capacidad de innovación de las empresas portuguesas. Estas iniciativas son cruciales para garantizar un entorno económico dinámico y atractivo para inversores y empresarios.

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